Jupiter’s Legacy: ¿Qué superhéroe te llevarías a una isla no desierta?

Encontré Jupiter’s Legacy en los estantes de la tienda de cómics a la que mis compañeros de piso y yo llamamos “el salón”. Mark Millar no es mi guionista preferido, lo que me da motivos para coger los dos tomos y sentarme a leer criticándole. Y más después de haber tenido que esperar a las dos últimas páginas de Entre los muertos para disfrutar la historia de uno de mis superhéroes fetiche, Spiderman.

Para mi sorpresa, el escocés, acompañado del realismo de Frank Quitely al dibujo y apoyado por el color de Peter Doherty, ha dado lugar a un mundo paralelo en el que los superhéroes buscan el poder en lugar de encontrárselo. Ese principio con aires de La isla del tesoro, Moby Dick o incluso Los Goonies, nos lleva hasta sus hijos como herederos fortuitos de dicho privilegio convertido en castigo.

En los dos tomos que trajo Panini Comics a España, que juntan las 10 grapas originales de Jupiter’s Legacy ,vemos el contraste de dos generaciones que están viviendo una crisis económica y moral idéntica. El año 1932 y el 2013 son un gato mirándose al espejo. La historia es como leer trap en cada artículo escrito por un periodista más bien añejo: te divierte y te duele a la vez. La gran diferencia entre ambas generaciones es la forma de mirar el mundo. Ver un árbol genealógico que parece crecer hacia abajo. Las raíces se hunden cada vez más buscando el calor del centro de la tierra y los frutos comienzan a caer sin nadie que los quiera recoger.

La mitología romana en el Legado de Júpiter

Este paso de generaciones se entiende bien si seguimos el mito de Júpiter. Este dios romano -cuyo nombre en la mitología griega es Zeus-, comenzó siendo el dios del clima y los ciclos agrarios. Con el paso del tiempo fue el protector de las ciudades y acabó tomando el poder del Estado en cuanto a justicia, derecho y leyes. Este ascenso da sentido a la idea del hijo de Utopian y Lady Iberty con respecto al poder. Brandon quiere gobernar por encima de cualquier pieza de la sociedad y es apoyado por su tío, Brainwave. Este Dios estaba muy presente en el emperador César Augusto y sus sueños. En ellos, el Todopoderoso le guiaba hacía un mundo soñado. La isla que persigue Sheldon.

El desarrollo de esta historia guía al lector siguiendo las raíces profundas entre disputas familiares, dilemas morales, superpoderes ocultos y reflexiones sobre el sistema económico. Porque Mark Millar muestra una gran preocupación por el aumento de la pobreza que genera un funcionamiento cuestionable de las élites, el libre mercado y las medidas desesperadas. Y lo muestra enfrentando al bando de Brandon contra el de su hermana Chloe. Esta especie de Civil War nos presenta un postcapitalismo que el capitalismo descontrolado al que buscan derrocar. “Peor el remedio que la enfermedad”, diría mi abuela.

Estos dos tomos acaban abriendo una historia que encontrará su fin cuando sus creadores quieran. El escritor de Kick-Ass, Superior y Kingsman, entre otras historias, lanzó a partir de 2015 una colección que sirve como precuela a lo ocurrido en Jupiter’s Legacy llamada Jupiter’s Circle. Y de momento, me sigue haciendo esperar para poder quejarme o alabar el final de la trama. Superhéroes con familia, crisis económica y una isla no desierta.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Close

Síguenos