Cosmonauta (El Transbordador, 2020) es un viaje de Fran Sesidoble entre la poesía y el asombro que provoca la realidad. Una exploración desde la soledad que experimentó Yuri Gagarin en el Vostok 1 que unen al poeta con la música de Flat Erik/Erik Urano. Esta reseña no busca tanto analizar el libro como seleccionar ciertas partes en las que la ciencia y el arte colisionan en una imagen, unos versos y unos sonidos que, inconscientemente, crean un “océano cósmico”.
Como dice Gisela Baños en el postfacio:
“Y es que, tal vez, lo que hacen los poetas y lo que hacen los científicos no sea tan distinto […] no sólo los poetas eran románticos: los científicos también.”

Escritor, periodista cultural y librero en la librería 80 Mundos. Codirector de todo esto. He colaborado en medios como eldiario.es o Le Miau Noir. Formo parte de la antología Árboles Frutales (Editorial Dieciséis, 2021) y Odio la playa (Cántico) es mi primer libro.